Espacio de la Espiritualidad

6º Día: El Espíritu Santo viene en lugar de Jesús

G/. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo

T/. Amén

Canto o invocación inicial Secuencia del Espíritu Santo

1º Lect.: Del Evangelio según San Juan (Jn 16,5-8)

⁵ “Ahora me voy al que me envió, y ninguno de ustedes me pregunta: “¿A dónde vas?” ⁶ Pero al decirles esto, ustedes se han entristecido. ⁷ Sin embargo, les digo la verdad: les conviene que yo me vaya, porque si no me voy, el Paráclito no vendrá a ustedes. Pero si me voy, se lo enviará. ⁸ Cuando él venga, probará al mundo dónde está el pecado, dónde está la justicia y cual es el juicio”.

Pausa de reflexión

2º Lect.: De los Escritos de Madre Carmela

“Yo deseo tanto que este Paráclito Divino descienda sobre nosotros, sobre todas mis buenas hijas, sobre todos los religiosos, en fin, sobre todos; y cada día ruego mucho por este fin… siento la necesidad que este Divino Espíritu descienda en modo especial sobre mí y me ilumine la mente y me inflame el corazón…”

Pausa de reflexión

Intercesiones

G/.Haciendo nuestra la súplica de Jesús al Padre y digamos:

T/.Mándanos tu Espíritu

• Para que se realice la unidad entre las iglesias y así el mundo crea.
• Para que se realice la unidad de todos los cristianos y así el mundo sepa que el Padre te ha enviado.
• Para que se realice la unidad de la familia humana y así el mundo sepa que el Padre nos ama.

G/. Oremos

Oh, Padre, que al hombre hecho a tu imagen, has comunicado el deseo de participar a la profundidad de tu vida divina y en Cristo haz querido hacernos probar la dulzura de tu amor, manda sobre la Iglesia tu Espíritu Santo para que los fieles puedan gustar la dulzura de tu presencia. Por Cristo, nuestro Señor. Amén.

Canto final

5º Día: El Espíritu Santo es el primer Testigo

G/. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo

T/. Amén

Canto o invocación inicial Secuencia del Espíritu Santo 

1º Lect.: Del evangelio según San Juan (Jn 15,20-21.26-27)

²⁰ “Acuérdense de lo que les dije: el servidor no es más grande de su señor. Si me persiguieron a mí, también los perseguirán a ustedes; si fueron fieles a mi palabra, también serán fieles a la de ustedes. ²¹ Pero los tratarán así a causa de mi Nombre porque no conocen al que me envió. ²⁶ Cuando venga el Paráclito que yo les enviaré desde el Padre, el Espíritu de la Verdad que proviene del Padre, él dará testimonio de mí. ²⁷ Y ustedes también dan testimonio, porque están conmigo desde el principio”.

Pausa de reflexión

2º Lect.: De los Escritos de Madre Carmela

“Jesús está dispuesto a darnos su Espíritu Divino, atraigámoslo con nuestros gemidos, con nuestros suspiros, con nuestras oraciones, con la exacta observancia de nuestros deberes, con los sacrificios, con la penitencia, con las mortificaciones y con un continuo recogimiento, acompañado del fervor de nuestra voluntad y así descenderá y descansará este Espíritu Divino en nuestros corazones, aportándonos todos sus dones”[1]

Pausa de reflexión

Intercesiones

G/.Convocados por el Espíritu Santo, dirijamos la oración a Dios, nuestro Padre para que nos haga verdaderos testigos de Cristo, retomando con vigor el camino de la luz y la esperanza y digamos:

T/.Dónanos la luz de tu Espíritu

• Para que el Espíritu nos sostenga en la lucha contra el mal que hay en nosotros, nos haga fuertes en la persecución y en las pruebas, y nos ayude para que correspondamos a nuestra vocación para ser “sal de la tierra y luz del mundo”.
• Para que el Espíritu de Verdad asista a todos los creyentes en Cristo y las iglesias esparcidas por la tierra, para que mirando al Señor sobre la cruz hagan las elecciones necesarias para construir una verdadera familia que profesa la misma fe.
• Para que el Espíritu Santo que hemos recibido en la Confirmación, nos haga profetas de Jesús con las palabras y con el testimonio de la vida.

G/. Oremos

Oh Padre que acompañas siempre la existencia y las acciones de tus hijos con los dones de tu Espíritu; haznos atentos y dóciles a esta voz interior para que la fuerza que en Pentecostés ha fortalecido a los apóstoles nos transforme y nos haga fuertes y generosos, nos asimile a Cristo y nos consagre a tu servicio con la palabra y el testimonio. Por Cristo, nuestro Señor. Amén.

Canto final

[1] Vol. II, pág. 55, Carta a P. Vincenzo Nardelli, o.p., Palermo 19/05/1901

4º Día: El Espíritu Santo es el nuevo Maestro

G/. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo

T/. Amén

Canto o invocación inicial Secuencia del Espíritu Santo 

1º Lect.: Del Evangelio según San Juan( Jn 14, 23-27)

²³ “Jesús les respondió: “El que me ama será fiel a mi palabra, y mi Padre lo amará; iremos a él y habitaremos en él. ²⁴ El que no me ama no es fiel a mis palabras. La palabra que ustedes oyeron no es mía, sino del Padre que me envió.

²⁵ Yo les digo estas cosas mientras permanezco con ustedes. ²⁶ Pero el Paráclito, el Espíritu Santo, que el Padre enviará en mi Nombre, les enseñará todo y les recordará lo que les he dicho.

²⁷ Les dejo la paz, les doy mi paz, pero no como la da el mundo. ¡No se inquieten ni teman!”.

Pausa de reflexión

2º Lect.: De los Escritos de Madre Carmela

“El Amor es el sendero derecho que seguramente conduce al cielo; todos los otros caminos, sin el amor, son oblicuos y nunca llegarán al deseado fin. El Amor es el alma de toda virtud y de toda obra buena. El Amor es aquella fuerza vital que todo hace soportar con humilde resignación y con invicta paciencia y constancia. El Amor nunca se acabará, dura y durará eternamente; todo terminará, todo pasará pero el amor quedará y sobrevivirá a todos los siglos…

Inspírese entonces en este Divino Amor, haga de él un verdadero tesoro para su espíritu, pida ardientemente al Señor que este Amor Divino lo penetre todo, lo investa y lo consume continuamente para Él, en modo que su vida no sea otra cosa que una continua manifestación de aquel eterno y divino amor que ha establecido su reino y su trono en su corazón”.[1]

Pausa de reflexión

Intercesiones

G/.Con la confianza filial que el Espíritu de Cristo suscita en nuestros corazones, elevemos la oración a Dios, Padre misericordioso, que escucha aquello que pone en el corazón y en los labios de aquellos que confían en Él y digamos:

T/.Venga a nosotros tu Espíritu, oh Padre

• Que tu Espíritu de Verdad, asista a los pastores de la Iglesia, a los maestros en la fe, a los teólogos, catequistas, consagrados, padres de familia y todos aquellos que tienen la misión de enseñar.
• Que tu Espíritu asista a aquellos, que con sus intuiciones y descubrimientos, han abierto nuevos senderos para la humanidad.
• Que tu Espíritu nos haga descubrir tu Palabra en lo cotidiano de cada día.

G/. Oremos

Oh Dios que en el misterio de Pentecostés nos has donado tu Espíritu como Maestro interior, que con corazón lleno de confianza nos hace gritar “Abba, Padre”, dona a la Iglesia corazones generosos, capaces de testimoniar el primado de la caridad. Por Cristo, nuestro Señor. Amén.

Canto final

[1] Vol. III, pág. 63, Carta a P. Vincenzo Nardelli, o.p., Roma 22-25/10/1903

3º Día: El Espíritu de la Verdad

G/. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo

T/. Amén

Canto o invocación inicial Secuencia del Espíritu Santo 

1º Lect.: Del Evangelio según San Juan (Jn 14,15-20)

¹⁵ “Si ustedes me aman, cumplirán mis mandamientos. ¹⁶ Y yo rogaré al Padre, y él les dará otro Paráclito para que esté siempre con ustedes: ¹⁷ el Espíritu de la Verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque no lo ve ni lo conoce. Ustedes, en cambio, lo conocen, porque él permanece con ustedes y estará en ustedes.

¹⁸ No los dejaré huérfanos, volveré a ustedes. ¹⁹ Dentro de poco el mundo ya no me verá, pero ustedes si me verán, porque yo vivo y también ustedes vivirán. ²⁰ Aquel día comprenderán que yo estoy en mi Padre, y que ustedes están en mí y yo en ustedes”.

Pausa de reflexión

2º Lect.: De los Escritos de Madre Carmela

“¡El Espíritu “Septiforme” cubra continuamente su alma, poseyéndola toda y vivificándola con su amor! … Entonces mantenga siempre su corazón en alto y con la mirada de la fe continuamente elevada sobre cualquier cosa que pudiese disturbar su espíritu aún en lo más mínimo. Mire y contemple con admiración los sabios designios de Dios en los que será modelado su espíritu para que pueda corresponder a aquel Arquetipo divino que especiales miradas tiene sobre su alma”[1].

Pausa de reflexión

Intercesiones

G/.Roguemos a Jesucristo y digámosle:

T/.Escúchanos oh Señor

• Que tu Espíritu de Verdad, lleve a todos los hombres al conocimiento de la salvación.
• Que tu Espíritu fortalezca a los que vacilan en la fe y dé testimonio de Ti.
• Que tu Espíritu nos haga capaces de llevar la Verdad en la Caridad para que tu Reino de amor se establezca en todo el mundo.

G/. Oremos

Oh Padre, que a través de la luz del Espíritu Santo, guías a los creyentes al conocimiento pleno de la verdad, dónanos de gustar en tu Espíritu la verdadera sabiduría y gozar siempre de su conforto. Por Cristo nuestro Señor. Amén.

Canto final

[1] Vol. II, pág. 133, 134ª Carta a P. Vincenzo Nardelli, o.p., Palermo 18/05/1904

2º Día: El Espíritu Santo prepara la venida del Verbo

G/. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo

T/. Amén

Canto o invocación inicial Secuencia del Espíritu Santo 

1º Lect.: Del Evangelio según San Lucas. (Lc 1,28-35)

²⁸ El ángel entró en su casa y la saludó diciendo: “¡Alégrate!, llena de gracia, el Señor está contigo”. ²⁹ Al oír estas palabras ella quedó desconcertada y se preguntaba que podría significar ese saludo. ³⁰ Pero el ángel le dijo: “No temas, María, porque Dios te ha favorecido. ³¹ Concebirás y darás a luz a un hijo, y le pondrás por nombre Jesús; ³² Él será grande, y será llamado Hijo del Altísimo. El Señor Dios le dará el trono de David, su padre, ³³ reinará sobre la casa de Jacob para siempre y su reino no tendrá fin”.

³⁴ María dijo al ángel: “¿Cómo puede ser eso, si yo no tengo relaciones con ningún hombre?”. ³⁵ El ángel le respondió: “El Espíritu Santo descenderá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el niño será el Santo y será llamado Hijo de Dios”.

Pausa de reflexión

2º Lect.: De los escritos de Madre Carmela

“…Yo, a ejemplo de María nuestra dulcísima Madre y Maestra, respondí solamente estas palabras: “Señor, he aquí tu sierva y esclava que ante el cielo y la tierra, hoy y para siempre se declara solemnemente tu esclava perpetua, totalmente abandonada en tus manos y a tu plena disposición. Se cumpla también en mí tu voluntad hoy y siempre”[1]

Pausa de reflexión

Intercesiones

G/.Roguemos a Jesucristo, el Señor y digámosle:

T/.Mándanos tu Espíritu

• Que tu Espíritu, que ha fecundado a la Virgen María, llene de alegría a la Madre Iglesia por el nacimiento de nuevos hijos e hijas.
• Que tu Espíritu acompañe a los que continuamos tu misión anunciando la buena noticia a los pobres.
• Que tu Espíritu nos empuje a vivir la libertad y la gracia que vienen del Padre.

G/. Oremos

Oh Dios, che nos has creado a tu imagen: nuestro corazón está inquieto hasta que no descansa en ti; dónanos de gustar la dulzura de tu Espíritu, que es amor. Por Cristo nuestro Señor. Amén.

Canto final

[1] Vol. IV, pág. 127, 42° Informe espiritual a P. Emmanuele Calí, s/f.

1º Día: El Espíritu Santo es una buena noticia

G/. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo

T/. Amén

Canto o invocación inicial Secuencia del Espíritu Santo 

1º Lect.: Del Evangelio según San Lucas  ( Lc 3, 21-22)

²¹ Todo el pueblo se hacía bautizar, y también fue bautizado Jesús. Y mientras estaba orando, se abrió el cielo ²² y el Espíritu Santo descendió sobre él en forma corporal, como una paloma. Se oyó entonces una voz del cielo: “Tú eres mi Hijo muy querido, en quien tengo puesta toda mi predilección”.

Canto

2º Lect.: De los Escritos de Madre Carmela

“Entre las muchas gracias recibidas durante esta novena una sola le escribo por ahora… en la santa comunión Jesús me mostró su Adorabilísimo Corazón cual fuente perenne de gracias divinas… De repente salía de aquel amoroso manantial una blanquísima paloma que, tomando vuelo, venía a posarse sobre mi cabeza y después, bajando sobre mi corazón, con el pico todo mojado de sangre, escribía en mi corazón, con letras de sangre, el nombre santísimo de Jesús, como eterno sigilo de recíproco amor” [1]

Pausa de reflexión

Intercesiones

G/.Roguemos a Jesucristo y digamos:

T/.Manda, Señor, tu Espíritu

• Que tu Espíritu fortalezca y renueve a tu Iglesia.
• Que tu Espíritu persuada de tu victoria sobre el mal a todos aquellos que sufren y viven sin esperanza.
• Que tu Espíritu convenza a aquellos que pretenden salvarse por sí mismos, que la salvación eres Tú.

G/. Oremos

Cumple Señor tu promesa: envíanos desde el Padre la consolación del Espíritu Santo. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

Canto final

[1] Vol. II, págs. 58-59, Carta a P. Vincenzo Nardelli, o.p., Palermo 27/05/1901