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Mes en honor del Sagrado Corazón de Jesús

Vigésimo día:

“El Sagrado Corazón de Jesús, sede de la justicia, la santidad y la misericordia divina”

Madre Carmela escribe a su confesor, ayudándole en un momento de prueba, e le manifiesta lo que el Señor le ha hecho sentir:sc20El Amante Señor me decía así (hablaba respecto a usted): “Para que él sea verdaderamente justo ante mí, como hijo queridísimo de mi Corazón, es necesario que sea purificado con la mirada de mi Justicia y Santidad, pero mi misericordia, mi benignidad, mi dulzura, mi amor infinito, templan mucho el rigor de mi divina Justicia. Mi mirada vigilante está orientada siempre a él, guía sus pasos, sostiene la vida, ilumina sus potencias, dirige sus sentimientos, santifica las tendencias de su corazón, frena sus movimientos y endereza su espíritu hacia el sendero de la eternidad. Él, cual siervo fiel, e hijo dulcísimo de mi Corazón, dirija la mirada de su corazón a mí, se abandone totalmente en las manos de mi divina caridad”. (Escritos de la Fundadora, Vol. I, pág. 233)

Estas palabras pueden ser dirigidas a nosotros hoy:

  1. Es necesario pasar por la prueba para que nos hagamos dignos de la justicia y santidad de Dios. Su justicia no pesa, sino que es el sumo bien en el Ser divino y estamos llamados a asemejarnos a Él.
  2. Siempre la justicia de Dios está acompañada por su misericordia, su benignidad, su dulzura y su amor infinito; por este motivo podemos vivir la prueba con más fuerza.
  3. El Corazón dulcísimo de Jesús nos amad con un amor personalizado, único, sigue y guía a cada uno de nosotros de modo que todos alcancemos la meta deseada, sólo debemos abandonarnos a Él.

Hoy trataré de individuar en las pruebas que vivo, la mano divina del Señor, que me sostiene y me transforma según los sentimientos de su Corazón.

Mes en honor del Sagrado Corazón de Jesús

Décimo noveno día:

 “El Sagrado Corazón de Jesús, refugio seguro en la desolación”

Aquí hay una página de Madre Carmela, donde emerge su pequeñez y la grandeza de su fe y su amor: 

sc19El amor de Jesús sea nuestro alimento sobrenatural que nos alimente y nutra cotidianamente, y todos nuestros pensamientos, palabras y acciones sean intintos y empapados por su preciosísimo amor.

En estos tiempos  no se imagina cuánta necesidad experimento de ser aconsejada, dirigida, reconfortada; siento una necesidad tan fuerte que seguido derramo también alguna lágrima a los pies de Jesús, confiándome totalmente en Él y abandonándome completamente en los brazos de su amorosa Providencia, con la plena confianza que Él mismo vendrá a socorrer mi pobre alma, cuando la voz de mi dolor, sofocada por gemidos y suspiros, se hará sensible a su Corazón. Crea también, oh Padre mío, que mientras por un lado, Jesús está conmigo con las inefables finezas de sua amor, con sus dulzuras, con sus favores, con sus gracias divinas, por otro lado no faltan nunca las más terribles tribulaciones. (Escritos de la Fundadora, Vol. I, pág. 265)

De la experiencia de la sierva de Dios podemos recoger la enseñanza para nosotros:

  1. También Madre Carmela experimenta, a veces muy fuerte, la desolación del alma y tiene necesidad de un sostén aun humano, de la palabra de su confesor..
  2. En esos momentos, en vez de desanimarse o perder la calma, ella recurre al Señor, porque sabe que tocará el Corazón de Jesús.
  3. A veces se experimentan momentos de gracia, acompañados por dolores morales o de otro tipo, pero lo importante es vivirlos como Madre Carmela, en la paz y el abandono total en el Corazón de Jesús.

Hoy pediré de saber vivir la prueba con fe y amor como Madre Carmela, y de poder gustar los consuelos divinos con espíritu de gratitud.

Mes en honor del Sagrado Corazón de Jesús

Décimo octavo día:

 “El Sagrado Corazón de Jesús está siempre con nosotros”

La Sierva de Dios sabe animar, con fe, en los momentos de dificultad: 

sc18Jesús está con usted, por lo tanto descanse tranquilamente en su Corazón divino, con plena y absoluta confianza, duerma en sus paternos brazos, seguro que en los brazos de Jesús tan amante, su alma comenzará con certeza y pasos firmes a caminar por esa senda que lo conducirá directamente al bienaventurado lugar que no tendrá fin nunca. (Escritos de la Fundadora, Vol. IV, págs. 70-71)

Estas palabras pueden ser dirigidas hoy a nosotros:

  1. Madre Carmela habla con total confianza y plena certeza de esta verdad, por eso anima todavía hoy a hacer como ella hacía.
  2. A veces nos falta fe para creer realmente que Jesús está con nosotros, ¡Siempre! Probemos en descansar en su Corazón divino en cada momento de la jornada.
  3. El abandono total y confiado en el Corazón de Jesús nos hará caminar seguros hacia la vida eterna.

Hoy me confrontaré sobre mi fe y confianza que tengo en Dios, luego me abandonaré con todo mi ser en el Corazón divino de Jesús.

Mes en honor del Sagrado Corazón de Jesús

Décimo séptimo día:

 “El Sagrado Corazón de Jesús quita todo temor”

Escuchemos, hoy, lo que escribe Madre Carmela a su confesor acerca de una experiencia vivida en la oración: 

sc17Hoy en la oración Jesús mostrándoseme todo dulzura y amor, me ha dicho: “Dulcísima hija de mi Corazón, ¿qué cosa temes? ¿No ha sido versada toda mi sangre como precio de tu perdón?” Y diciéndome esto salpicaba con esa sangre divina, que salía abundante de su costado abierto, agregando estas palabras: “Esta sangre divina mía te sea prenda de eterna salvación, de amor infinito, de perpetua predilección”. (Escritos de la Fundadora, Vol. IV, pág. 53)

De estas palabras, podemos sacar para nuestro provecho:

  1. Todo temor desaparece a la presencia del Corazón de Jesús que conforta y sana con su sangre, la cual es precio de nuestro perdón.
  2. Es la sangre del costado abierto de Jesús que se convierte en prenda de segura redención para nosotros, de amor infinito y de perpetua predilección, porque ha sido esparcida sólo por amor en la cruz, por nosotros.

Hoy me detendré a meditar y contemplar el valor redentor de la sangre del costado de Cristo.

Mes en honor del Sagrado Corazón de Jesús

Décimo sexto día:

“El Sagrado Corazón de Jesús,  lleno de amor en la Eucaristía”

 Una vez más les presentamos un informe de Madre Carmela a su director espiritual, en el que le manifiesta su unión con Jesús a través de la Eucaristía.

sc16Por lo tanto Él, tomó mi corazón y lo unió al suyo en modo de formar de los dos uno solo, y así transformado, o mejor dicho divinizado, lo ponía nuevamente dentro de mi pecho diciéndome: “La potencia de mi amor atrae a sí tu corazón y lo une todo, lo transforma en mí mismo Corazón, en modo de formar uno solo, una sola cosa, para vivir solamente de mi misma vida, de mí mismo Corazón, de mí mismo amor. Viniendo yo en ti en la Santa Comunión, tú vienes a Mí, y esto por potencia de mi amor, el cual, uniéndome a ti al alimentarte de mis mismas carnes divinas, hace que seas una misma y sola cosa conmigo, te une, te ensimisma, te transforma, te abisma toda en mí, en mí mismo Ser divino”. (Escritos de la Fundadora, Vol. I, pág. 257-258)

Reflexionemos juntos sobre este texto:

  1. Otra vez notamos que es en la Eucaristía, mientras hace la comunión, que Madre Carmela tiene una experiencia fuerte con el Corazón de Jesús.
  2. Esta experiencia se manifiesta en la unión íntima de los corazones de Jesús y de Madre Carmela, al punto que ella siente su mismo amor.
  3. Al alimentarse de su santa Carne, la Sierva de Dios, se ensimisma, se transforma, se abisma en el mismo Ser Divino.

Hoy pediré al Señor la gracia de vivir el momento de la Santa Comunión como una ocasión especial para experimentar la unión del corazón con el Corazón Divino de Jesús.

Mes en honor del Sagrado Corazón de Jesús

Décimo quinto día:

“El Sagrado Corazón de Jesús, a quien se recurre en la prueba”

Hoy les ofrecemos una carta de la Sierva de Dios a una hija suya en crisis:sc15La bendición del Señor y su paz divina desciendan abundantemente en tu alma y le den nuevamente la calma, la tranquilidad, llenándola de santo y divino amor.

He leído tu cartita y quedo completamente al tanto de todo lo que me dices, quédate tranquila de todo, descansa humildemente en la santa obediencia y bajo la mirada de Dios, es más, en su Corazón divino y no temas nada.

Yo vigilo y rezo continuamente por tus necesidades respecto a tu alma, a tus perplejidades, timores, dudas y en general sobre todas tus necesidades, mándalo todo a mí y di con fe al Señor: “Dios mío, sólo quiero tu Voluntad”. Y allí descansa tranquila, sin preocuparte por nada. (Escritos de la Fundadora, Vol. III, pág.233).

¿Qué nos puede decir esta carta de Madre Carmela hoy?

  1. En los momentos de desánimo, perplejidad, prueba, el mejor modo de resistir es ser sinceros con quien ya está más adelante en el camino espiritual, para que nos ayude a ver con más claridad y objetividad. ¡Nunca nos cerremos y queramos resolver las cosas solos!
  2. La Madre se ocupa de corazón de esta hermana en crisis y le asegura su oración, su cercanía, es más, pide a la hermana de dejar todo en sus manos, es decir que se hace cargo totalmente de la crisis de la hermana.
  3. Sabe orientar a la hermana hacia Dios, es más, a su Corazón, para que allí encuentre paz y fuerza en su Voluntad.

Hoy verificaré cómo vivo mis pruebas: ¿en la humildad de quien se confía y se entrega o en la soledad que no quiere pedir ayuda? Y también: ¿Cuando ayudo a los otros, me encargo de corazón de sus inquietudes como Madre Carmela?

Mes en honor del Sagrado Corazón de Jesús

Décimo cuarto día:

“El Sagrado Corazón de Jesús, compasivo en la enfermedad”

El corazón de Madre Carmela es siempre grande y misericordioso, aun en esta ocasión en que tuvo muchas hermanas enfermas:

¡Sólo Jesús sea nuestro único amor, nuestra vida, nuestro todo!

sc14Siempre sean dadas gracias a nuestro Amabilísimo Señor que se digna de visitarnos seguido con estas tribulaciones. Entre muchas otras cosas, me ha angustiado bastante la enfermedad de algunas de mis buenas hijas, mucho más porque son enfermedades un poco serias. En cada casa ha habido una o dos hermanas enfermas que me han preocupado muchísimo, y todas al mismo tiempo. He rezado a Jesús que, por su especial Bondad, me las restituya sanas pronto, y Jesús, tan bueno ha tenido compasión de mi debilidad y de mi miseria y por su misericordia ya han mejorado bastante todas, en grado de convaleciente. (Escritos de la Fundadora, Vol. III, pág. 198)

Leamos dentro las simples líneas que ha escrito Madre Carmela:

  1. Ella inicia su carta recordando y poniendo como slogan, el fin de su vida: sólo y siempre Jesús es el centro de todo.
  2. Aun el sufrimiento es vivido por Madre Carmela como una visita del Señor, y por ello le da gracias, también cuando la angustia la invade.
  3. El objeto de la preocupación de Madre Carmela es la salud de sus hijas, por ellas reza, se preocupa, tiene realmente un corazón de Madre, habla de ellas como de pertenencia afectuosa: “mis hijas”; “me las restituya”.
  4. La sanación la atribuye a su oración y a la relación que tiene con Dios, tan bueno con ella.

Hoy estoy invitado/a a estar atento a mi estilo de hablar, si refleja mi pertenencia a Dios, si es espiritual o demasiado mundano. Luego, examinaré mis relaciones y la gente que trato en el apostolado: ¿Las siento mías, en relación al Señor? es decir: ¿Son relaciones libres, pero cargadas del amor del Corazón de Dios?

Mes en honor del Sagrado Corazón de Jesús

Décimo tercer día:

“El Sagrado Corazón de Jesús, océano inmenso de amor y dulzura”

La acción de Dios durante la oración, en Madre Carmela, es potentemente eficaz:

sc13En el mismo momento en que me sentí atraer tan vehemente hacia Dios, entendí estas palabras: “Hija mía querida, abandónate libremente en los brazos de mi Providencia, sumérgete y reposa en el océano infinito de mi Corazón, allí serás revestida de nueva gracia y virtud, que te harán  cada vez más conforme a mí, tu modelo y único fin”. Al sentir pronunciar estas palabras mi corazón abundó plenamente de dulzura y de amor de manera extraordinaria. (Escritos de la Fundadora, Vol. I, pág. 132)

Aquí está el fruto de la oración de Madre Carmela, que ahora podemos hacer nuestro:

  1. La Sierva de Dios siente una atracción tan fuerte hacia Dios que no puede quedar indiferente, se deja transportar por la acción divina.
  2. Ella siente que el Señor le ofrece aquello que más deseamos mientras vamos por nuestro camino en la tierra: estar abandonados en los brazos e Dios, descansando en el inmenso océano de su Corazón.
  3. La acción de Dios nos da un profundo amor y dulzura extraordinarios.

Hoy, en la oración, trataré de dejar obrar totalmente al Señor para que me atraiga a Sí y yo pueda descansar en el océano inmenso de su Corazón.  

Mes en honor del Sagrado Corazón de Jesús

Duodécimo día:

“El Sagrado Corazón de Jesús, único objeto de nuestro amor”

La Sierva de Dios Madre Carmela, nos comparte algo muy personal que puede ayudarnos en nuestras jornadas:

sc12Hoy, hacia las cuatro p.m. estaba sentada, con la mente y el corazón orientados siempre al único objeto de todo mi amor, ofreciendo a Él todas mis penas, mis sufrimientos, mi vida, mi voluntad, en una palabra toda mí misma, implorando al mismo tiempo a su Corazón, todas aquellas gracias que se requieren para hacer de mí Su perfecta amante, una víctima digna de amor, en fin, una copia perfectísima de este Divino Modelo. (Escritos de la Fundadora, Vol. II, pág. 79)

Reflexionemos juntos:

  1. Aun durante la jornada, so sólo cuando reza, Madre Carmela dirige su corazón al único objeto de su amor: el Corazón del Verbo Encarnado.
  2. Su obrar se convierte en un continuo ofrecimiento de sí misma, pidiendo también las gracias para ser una perfecta amante, una víctima digna de amor y una copia fiel de Jesús.
  3. En el ofrecimiento, Madre Carmela dona todo, no sólo las cosas bellas, sino también sus penas y sufrimientos, es decir, no se deja nada para sí, ya todo pertenece a Él.

Hoy pediré la gracia de tener como único objeto de mi amor el Sagrado Corazón del Verbo Encarnado, es decir sólo Jesús y de ofrecerme con generosidad para ser una copia fiel de Él que se ofreció al Padre por nosotros.

Mes en honor del Sagrado Corazón de Jesús

Undécimo día:

“El Sagrado Corazón de Jesús dona su Corazón a Madre Carmela”

En un arrebato de amor total, Madre Carmela Prestigiacomo relata a su confesor una experiencia espiritual muy fuerte:

sc11Yo me siento toda renovada en el espíritu, siento de ser totalmente de Jesús, de vivir sólo para Él y con Él; sólo su amor reina en mis sentimientos, sólo su honor, su gloria es mi interés. Cuando me daba este nuevo corazón el amable Jesús me decía así: “Te doy un corazón similar al mío, es más, mi mismo corazón; con este corazón tú me amarás, con este corazón tú vivirás una vida de amor; te he elegido como compañera de mis dolores, de ahora en adelante te asociaré a mis penas, a mis angustias, a mis tristezas que continuamente sufro en el Sacramento de mi Amor, donde soy por la mayor parte de los hombres olvidado, ultrajado, despreciado. Compartiré contigo todas estas penas mías y tú aliviarás con tu amor mi desolado Corazón y repararás lo que no reconocen los demás”. (Escritos de la Fundadora, Vol. III, págs. 48-49)

Tratemos de entender juntos el sentido de estas palabras:

  1. Madre Carmela inicia declarando su estado espiritual y psicológico: ella vive sólo para Jesús y con Jesús, su gloria es su único interés; es decir que ha llegado a olvidarse de sí misma para dar espacio sólo a Dios. Esto nos hace recordar lo que decía San Pablo: “no soy yo quien vive, sino que es Cristo quien vive en mí”.
  2. El estado en que vive la Sierva de Dios es posible gracias a que el Señor le ha donado un nuevo corazón, es más, su mismo corazón, aquí está la grandeza de Dios que se baja hasta las creaturas y nos transforma en él.
  3. La unión de los corazones llevará a Madre Carmela a ser compañera también en el sufrimiento, no porque Jesucristo pueda sufrir todavía, sino que, en el sentido paulino, ella completa en su cuerpo lo que falta de los sufrimientos de Cristo, por los pecados de los hombres, sobre todo en el Sacramento de la Eucaristía.

Hoy pediré al Señor de darme un corazón similar al suyo, para no vivir más para nosotros mismos, sino sólo para Él y así tener el coraje de estar pronto para reparar todas las ofensas que sufre, especialmente en el Sacramento del Amor.