Ánimo, valentía y adelante en el camino de Dios, sin volvernos a mirar atrás. El pasado es pasado, no nos queda más que el presente y el porvenir.
(Venerable Carmela Prestigiacomo)
¡Sólo Jesús
sea nuestro único amor,
nuestra vida,
nuestro todo!
(Venerable Carmela Prestigiacomo)
La paz de Dios, aquella paz dulce y suave que Jesús vino a traer sobre la tierra a los hombres de buena voluntad, sea para usted aquel bálsamo saludable y divino que sane todas las heridas de su corazón.
(Venerable Carmela Prestigiacomo)
Él me hizo ver cómo San José fue llamado por Dios mismo, porque era hombre justo y temeroso, para ser custodio y testigo de los secretos del Altísimo que se debían cumplir en María; fue, además, probado por Dios en su fidelidad.
(Venerable Carmela Prestigiacomo)
Trabaja incansablemente
para que mi amor
reine y se establezca
en todos los corazones.
(Venerable Carmela Prestigiacomo)
Ánimo entonces
y pleno abandono en Dios
y no dude que el Señor lo asistirá,
protegerá y defenderá
en todo y para todo.
(Venerable Carmela Prestigiacomo)
Sí, tengo firme voluntad de corregir mi vida de modo de hacerme, con la ayuda divina, una verdadera copia de aquel Divino Modelo, que ha esparcido toda su sangre para redimir mi alma.
(Venerable Carmela Prestigiacomo)
Jesús, Jesús, Jesús,
solamente Jesús sea
tu único amor, tu único respiro,
tu consolación, tu vida,
tu todo. Jesús, Jesús, Jesús.
(Venerable Carmela Prestigiacomo)
Ánimo, tenga su corazón
y su espíritu en Dios
y se estréchese totalmente
a aquel Dios que es todo Amor.
(Venerable Carmela Prestigiacomo)
El amor de Jesús sea nuestro alimento sobrenatural que nos alimente y nutra cotidianamente, y todo nuestro pensamiento, palabra y acción sean mojados y empapados de su preciosísimo amor.
(Venerable Carmela Prestigiacomo)